Derecho Penal

Se puede definir esta rama del derecho, como “aquella parcela del orden jurídico, que establece como presupuesto de un castigo o sanción, la comisión de un hecho o una omisión, nociva o peligrosa para la convivencia social armónica, resguardando los intereses más valiosos que pertenecen a la colectividad”. De esto se desprende que el Derecho Penal establece qué hechos (y en algunos casos omisiones) se consideran atentatorios a los derechos e integridad de las personas y de la sociedad en general, y por tanto, para evitar tales conductas, amenaza la comisión de las mismas con una sanción enérgica, como puede ser una prolongada privación de libertad. Es entonces, una de las áreas de mayor preocupación por el legislador, siendo por una parte una herramienta útil para mantener el orden, siempre que no existan otras instancias de control que puedan restablecer el orden de cosas. Esto, porque las sanciones penales son graves, afectan no solo los bienes o el contenido patrimonial del sujeto, sino que su libertad, y antiguamente hasta su vida e integridad física. Por ello, una defensa eficiente, puede remediar acusaciones injustas, o procurar que se aplique una sanción que no exceda el contenido del injusto. Se preocupa también el legislador por la situación del sujeto que ya ha entrado al sistema penitenciario, luego de ser condenado, procurando que su estancia en recintos de detención esté acorde con su dignidad y consideración como persona en vías de readaptación.